El Caparazón de Casiopea

Poema XX ¿Quién regula los procesos y custodia los programas por los que el pasar del tiempo resuelve  su crucigrama? ¿Quién volatiliza  pesos y desenreda las tramas con los que el pasar del tiempo desmenuza su diagrama? ¿Quién controla los excesos o inspecciona las derramas que hacen del pasar del tiempo un singular pentagrama? Transformando sus deseos en una infalible trampa de la que el pasar del tiempo no rehuye no se escapa.

Poema XIX Prometieron final para la pesadilla poder recuperar lo anterior al letargo, que ya no quedaría cabeza de la hidra si cumplíamos sin rechistar el encargo. Nos aseguraron que al plantar su semilla no habría retorno de...ni un sabor  amargo, sólo el aderezar con azúcar la cidra que activa y valida más mínimo descargo. Y va a resultar que la aciaga pesadilla sólo era una fase de persistente embargo, difícil de disolver cual cabeza de hidra quizá por seriedad con que asume su encargo. Ese de propagar o esparcir la semilla que se alimenta del rechazo y del hartazgo, siendo recolector sin igual de desdichas y precursor del desinterés mecenazgo.